Proposición indecente

Hace un par de semanas hicimos una sesión de fotos veraniega en una playa privada. La playa era realmente impresionante, con unos paisajes hermosos y entonces me enteré que esa playa pertenencia a un señor multimillonario.

Su nombre era Don José, aunque se empeñaba de que le llamásemos Don Pepe, no se cuantos años tenía pero rondaría los sesenta y algo, pero reconozco que son de esas personas muy enérgicas y joviales en su forma de ser.

Me pareció un viejecito muy adorable y aunque tenia las manos un poco largas… se hacía mucho de querer.

Aquí fue una foto me que hice con él durante el set de fotografía, que aunque él no posaba ni hacia fotografías, se acercó al set para vernos como trabajábamos.

Ambos bromeamos, pues él me dijo más de una vez que me quería “echar un polvo” y yo le contestaba entre sonrisas “si tuviera cuarenta años menos..”, pero él me repetía para dejármelo claro , que rara vez no consigue lo que se proponía.

Yo me tomaba esas palabras como el típico viejo salido, pero sin importancia, hasta que al poco tiempo recibí una carta de él.

En ella relataba lo impresionado que se quedo conmigo y me ofrecía una “cita” por una buena suma de dinero.

Tenía claro que esa cita no era otra cosa que follar con él y me vino a la cabeza lo que me comentó sobre que rara vez no consigue lo que quería.

Se lo enseñé a mi novio en plan anécdota, obviamente no iba aceptar aunque bajo mi sorpresa, él me propuso que me lo pensara, era mucho dinero y ¿un viejo que podría hacer? ¿Dos o tres minutos de acción como mucho? Eso si se le ponía dura.

Me lo tomé a broma lo que decía mi novio y decidí no hacerle caso a la carta, pero al poco recibí otra carta similar:

“Estimada Sucu,

Al no recibir contestación de mi primera carta entiendo que no estás interesada de mi propuesta, pero al contrario, yo estoy muy interesado en ti.

Por lo que te ofrezco triplicar esa cantidad por un día conmigo.

Soy una persona mayor y quiero disfrutar de lo que quiero en el poco tiempo que aun me queda.

Atentamente Don Pepe,

¿Triplicar por dejarme follar una noche? Mm.. me daba un poco de rabia, típica la actitud de los ricos de comprar voluntades por su dinero.. pero joder.. era mucho dinero y como decía mi novio, sería solo un par de minutos..

Acepté y me presenté en su mansión como indicaba en la carta, me puse una fina lencería negra, pues pensé que le podría gustar, y al verme su expresión me lo confirmó.

Su idea principal era, primero cenar, charlar y después pues follar, pero decidió saltarse todo los preliminares y me propuso empezar follando ya que era lo que ansiaba .

Me di la vuelta y me desnudé delante de él, aun tenía algunas dudas y giré cabeza para contemplar su cuerpo. Era un cuerpo en que la edad le había dejado marca, pero lo que realmente me sorprendió fue su polla, pues era bastante grande, gorda y sorprendentemente dura. ¿algún medicamento? No se, podría ser..

Se coloco detrás mía ojeando mi culo con deseo, yo esperaba la ternura que les representan a la gente mayor, pero no, me metió toda su polla dentro y empezó a follarme con energía..

Dios.. me pilló de nuevo por sorpresa qué me follará así de fuerte con eso delgados brazos que lucía, encima sentía su polla llenándome por completo y me castigaba con cada empuje la entrada de mi útero.

Decidí tomar un poco la iniciativa para que se relajara, me senté sobre él para cabalgarle durante un rato y dominar un poco la situación, pero ni así pude contener su furia sexual y empezó a embestirme como un toro que quiere desmontar a su jinete.

Al final desistí y me dejé hacerme lo que él quisiera, dejándome llevar… De vez en cuando su furia terminaba tras un grito de orgasmo, entonces sentía su semen caliente recorrer por mi cuerpo, unas veces fuera sobre mi torso y otras veces dentro de mí, pero lo asombroso era que tras correrse siempre continuaba sin descanso.. y me volvía a follar con la misma intensidad.

Olvidé que me estaban follando por dinero y busqué su boca en busca de su afecto, pues yo también sufría orgasmos muy intensos.. me corría y no me daba tregua para recuperarme.

Muchos hombres cuando te follan su meta es que la mujer tenga un orgasmo, pero este señor su objetivo era matarme a orgasmos ..

Pensé en que si me follaba con esta intensidad con esa edad, como hubieses sido de joven…

No se cuanto tiempo estuvimos follando, pero mi cuerpo estaba tan caliente del cansancio y húmedo del sudor que emitía vapor del cambio de temperatura. Su semen acumulado por mi cuerpo generaba pequeños hilos viscosos por donde me tocaba.

Estaba en modo Schock, sorprendida de lo que me estaba pasando y disfrutando de los mayores polvos que me habían echado.

Don Pepe eyaculó por ultima vez un gran chorro de leche caliente en mi espalda, tras un gemido mantuvo la postura de su polla apoyada en mis nalgas para recuperar algo de su aliento.

Vale, prometo que después de esta experiencia, ya no juzgaré a nadie por su edad ni apariencia.

Lección aprendía.

Por cierto a mi novio le diré que efectivamente fueron dos o tres minutos ^_^

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